¿Qué es la gestión de residuos?
Cuando hablamos de la gestión de residuos, se hace referencia a todas las acciones y procesos involucrados en la recolección, transporte, tratamiento y disposición final de los residuos plásticos, es decir, en hacerse cargo de un residuo u objeto, tanto si va a ser destinado para su eliminación o va a ser reciclado y reutilizado. Esto incluye la clasificación de los diferentes tipos de desechos, su separación de otros materiales, la eliminación segura de ésta y la minimización de su impacto ambiental. En cuanto a la gestión de residuos de plásticos, éste proceso comparte el mismo recorrido inicial que el resto de residuos hasta que es etiquetado y separado según su tipo y características específicas.
En relación a los procesos de gestión de residuos, se pueden destacar las siguientes etapas principales:
En primer lugar, se lleva a cabo la etapa de recogida, donde se realiza la recolección de los residuos de forma separada o en contenedores específicos, dependiendo de su tipo y características. Esta recogida se realiza mediante sistemas de recogida selectiva o a través de contenedores convencionales, con el objetivo de garantizar una correcta clasificación de los residuos.
En segundo lugar, se realiza la etapa de identificación y clasificación del residuo, donde se analiza tanto el material recolectado como el origen de los residuos. Estos pueden ser de origen doméstico, comercial, industrial, sanitario o agrícola. Para identificar el material recolectado, se cuenta con la ayuda de un laboratorio, donde se lleva a cabo su clasificación. El material se descarga en una línea de clasificación o planta de triaje, lo que permite determinar qué materiales están contaminados o no pueden ser reciclados, y cuáles son aptos para el proceso de reciclado.
En tercer lugar nos encontramos con la etapa de producción, etapa crucial en la que se dan diversas oportunidades para que las empresas sean más sostenibles. Para ello, dentro de este enfoque, los objetivos principales son reducir el consumo de energía, optimizar el uso de materiales y disminuir la generación de residuos, entre otras.
La etapa de distribución es el siguiente paso en el proceso de la economía circular, y un paso fundamental para continuar con esta cadena de sostenibilidad, ya que no solo implica optimizar el transporte desde el punto de producción hasta el punto de distribución o el consumidor final, sino también trabajar en aspectos como el embalaje, que debe ser reciclable, reutilizable, hecho de materiales reciclados o diseñado para reducir su peso/volumen.
En tercer lugar, se lleva a cabo la etapa de tratamiento de los residuos, donde se someten a diversos procesos con el objetivo de reducir su volumen, eliminar sustancias peligrosas y transformarlos en materiales reutilizables o recuperables. Estos tratamientos pueden incluir el compostaje, el reciclaje, la incineración controlada, entre otros métodos.
Finalmente, en la etapa de eliminación, cuando los residuos no pueden ser tratados o recuperados, se procede a su eliminación final. Esto implica su disposición en vertederos o instalaciones especializadas, siguiendo estrictamente las regulaciones ambientales y de salud y seguridad.
Ahora bien, al centrarnos en la gestión de residuos plásticos, una vez que el plástico se ha separado del resto de residuos y ha sido etiquetado y diferenciado según su tipo y material, se procede a llevar a cabo un proceso distinto. En esta etapa, los residuos de plástico se someten a diferentes procesos de tratamiento, como la trituración, el lavado, la separación y la granulación. Sin embargo, no todos los plásticos son iguales y algunos requieren someterse a procesos de reciclaje distintos. Es por esto que existen dos tipos de reciclaje: el reciclaje mecánico y el químico.
En el reciclaje mecánico, se trocea el material plástico y se introduce en una extrusora para fabricar gránulos reciclados, que luego son transformados mediante extrusión. Este método se utiliza para reciclar plásticos como botellas, envases, bolsas, entre otros.
Por otro lado, en lo que respecta al reciclaje químico, se lleva a cabo cuando los plásticos no pueden ser reciclados mediante métodos mecánicos tradicionales, como los plásticos multilaminados o las mezclas de diferentes tipos de plástico. A través de este proceso, los residuos plásticos se degradan y se transforman en nuevos productos químicos o combustibles. A diferencia del reciclaje mecánico, que se basa en la transformación física del plástico, el reciclaje químico utiliza procesos de descomposición y reacción química para convertir los residuos plásticos en sustancias útiles. Es por esto que el reciclaje químico ofrece una alternativa para aprovechar al máximo los residuos plásticos y reducir su impacto ambiental.
En este contexto, en Fych Technologies, tenemos una visión clara y ambiciosa para el futuro de la gestión de residuos. Creemos que podemos desempeñar un papel fundamental en la transformación de cómo se manejan los residuos, colaborando estrechamente con empresas fabricantes de envases plásticos y llevando a cabo investigaciones exhaustivas sobre residuos postconsumo y postindustrial.
Trabajamos diariamente en colaboración con empresas fabricantes de envases plásticos para establecer alianzas estratégicas que nos permitan acceder a una mayor cantidad de residuos plásticos post consumo, además de llevar a cabo investigaciones pioneras en el campo del reciclaje químico, realizando pruebas y experimentos para encontrar soluciones innovadoras para el reciclaje de plásticos que no pueden ser reutilizados mediante métodos mecánicos tradicionales.
En conclusión, la gestión de residuos plásticos es un proceso complejo que requiere de acciones coordinadas y conscientes para reducir su generación, fomentar el reciclaje y minimizar su impacto ambiental. Los procesos de reciclaje mecánico y químico son parte fundamental de esta gestión, ya que permiten aprovechar al máximo los residuos plásticos y contribuir a la sostenibilidad ambiental. Es importante promover la conciencia y la participación activa de la sociedad en la gestión de residuos plásticos, así como fomentar la investigación y el desarrollo de tecnologías innovadoras para el tratamiento y reciclaje de estos materiales.